Nació en la ribiera sur del pacifico mexicano, en un tiempo en que las telecomunicaciones eran una promesa: El cine fue su mejor amigo y, hasta la fecha, su más grande aliado.
Antes que leer o escribir, el cine, hizo que aprendiera el leguaje que se usa para contar historias. Se considera, asimismo, un gran voyeur.
Su especialidad es poner a cuadro, historias complejas con la simplicidad e inocencia de un niño de seis años.